Friday, January 29, 2016

De mindfulness, Limitless y emprendedores

Necesitamos empresarios conscientes. No hay vuelta de hoja, la Tierra y la humanidad ya no aguantan más.  Uno de los resultado de la reunión en Davos organizada por el World Economic Forum este pasado enero, es la publicación de las competencias críticas que deben desarrollar los líderes que esperamos guíen desde este año, sí, desde el 2016, el futuro del mundo. Entre una de ellas figura la empatía, y concuerdo totalmente con ello.

En la universidad en la que doy clase, los alumnos estudian la licenciatura para crear y desarrollar empresas, con sus distintas especialidades, pero es la única licenciatura que ofrecemos; esto con el fin de enfocar nuestros esfuerzos en formar a los futuros emprendedores seriales. Dicho esto, para el desarrollo de sus proyectos de emprendimiento les enseñamos una metodología que integra Design Thinking, Lean StartUp y Customer Development. Herramientas que están enfocadas en el emprendimiento ágil e inteligente basadas en el “pon a prueba y evoluciona rápido”. 

Para que puedan llegar a poner a prueba una solución traducida en un producto o servicio, deben primero haber tenido la capacidad de encontrar un problema, necesidad o deseo en un grupo de consumidores; y para poder llegar a identificar problemas, necesidades o deseos, el Design Thinking, por ejemplo, establece que hay que conocer la realidad del consumidor al que queremos servir. Esta herramienta busca que el emprendedor genere empatía con el público meta que quiere servir. Implícitamente establece que se debe tener una capacidad de observar y absorber la realidad de las personas a las que se visita y entrevista. ¿Pero realmente todos tenemos la capacidad de observar y absorber la realidad y que esto nos lleve a generar empatía? ¿Todos tenemos los mismos niveles de capacidad de observación y conexión con nuestros semejantes?

Estas son una pregunta que me he realizado durante el último año que he impartido las clases orientadas al desarrollo de ideas de productos y servicios, que me han llevado a la reflexión. ¿Cómo enseñamos a los nuevos empresarios a tener consciencia de su entorno y formamos en ellos la capacidad de tener empatía?

Cuando estoy enseñando estas herramientas veo que a la mayoría de mis alumnos les cuesta trabajo, a unos más a otros no tanto, pero sí veo que tienen que hacer un esfuerzo consciente y que de pronto como que no saben por dónde. No han aprendido el proceso de cómo observar y conectar. Es entonces cuando me he captado que me salen sugerencias de qué es lo que pudieran hacer ellos con respecto a sus proyectos y entonces me establece la pregunta ¿por qué a mí sí me sale? ¿Qué es lo que aprendí a hacer para que sucediera? ¿Ya lo traía yo como característica de mi forma de ser o es algo que aprendí o nutrí, si es que ya lo traía? Sé que entender estas preguntas me permitirá crear una conexión para encontrar la forma en que les puedo enseñar a formar estas habilidades de tal forma que les permita transformarse en esos empresarios y líderes altamente humanos y efectivos que buscamos que sean.

Así, al leer las competencias que publica el WEF, haber aprendido una que otra cosa interesante a lo largo de la vida, y luego de haber empezado a escuchar esto de la moda del ‘mindfulness’ he podido empezar a encontrar la respuesta.

Lo que hay en mí

Poner la cantidad de tiempo que vas a leer en texto, en blanco y negro, me ha dejado impresionado. He practicado la meditación desde hace 20 años. No había tomado consciencia de ello hasta ahora que lo escribo. Desde que tenía 21 y que lo aprendí durante mi primer programa terapéutico con mi psicóloga he practicado de manera intermitente, pero seguida, la meditación. Gracias a esta práctica y que la fui nutriendo a través de aprender otros ejercicios y programas, hoy me doy cuenta que es una habilidad que me es altamente útil en mi trabajo, para observar, comprender y empatizar. No soy un gurú new age ni nada parecido, esta disciplina la aprendí para calmar mi mente, para saber cómo encontrar mi centro, esto porque las ideas se me dan a mil por hora y a esa edad necesité encontrar una forma sana y nutritiva de lograr la paz mental, de mantenerme en centrado. Ahora comprendo que la práctica seguida de la meditación me ha permitido conseguir lo que hoy se conoce como mindfulness. No significa que sea un experto, para nada, soy apenas un principiante, pero hoy sé que si me puedo dar cuenta de muchas cosas que pasan alrededor gracias a que el practicar la meditación me ha permitido expandir consciencia de mi ser y de mi entorno.

Entonces ¿qué deberíamos hacer en las escuelas para formar la competencia y la habilidad de establecer empatía? ¿esto de mi experiencia-vida cómo me sirve y me funciona para ayudar a los demás?

Necesitamos empezar a enseñar técnicas de autoconocimiento y autoobservación en los alumnos. Mientras a más temprana edad mejor. En las universidades, si queremos que nuestos egresados salgan siendo líderes humanos y conscientes, entonces necesitamos enfocar materias desde sus primeros días hasta el último de su graduación, para lograrlo. Para que se lleven la disciplina y esto les permita ser más observadores, creativos, innovadores y en última instancia, transformadores y diseñadores del futuro. No hay de otra. Puesto esto es lo que se logra también con la meditación, lograr que la mente esté más atenta, más consciente de lo que ayer estuvimos (mindfulness) permite entonces lograr conexiones muy al estilo Limitless (la película). Lo sé porque así como lo pone la película, así lo siento, no a ese nivel tan alto, pero si siento este incremento en la capacidad de conexiones neuronales, y que se puede gestionar, alta conexión – reposo.

Por lo tanto, en conclusión ¿queremos emprendedores creativos, innovadores, líderes de empresa auténticos y empáticos, conscientes de quienes les rodean y de los problemas de nuestro mundo? Comencemos a enseñarles cómo lograr mindfulness.

Tuesday, January 26, 2016

Router Creativo

Un router —también conocido como enrutador o encaminador de paquetes— es un dispositivo que se utiliza en el mundo de las computadoras para proporcionar conectividad a la red. Su función principal consiste en recibir y enviar o encaminar paquetes de datos de una red a otra, es decir, interconectar subredes. Fuente: wikipedia

Ésta adaptación que me atreví a hacer de la definición que se encuentra en wikipedia, me permite explicarte de manera sencilla a lo que me dedico siendo un creativo inteligente (ver libro 'Cómo trabaja Google'). Es decir, me permite platicar cómo funciono, ja!

En una palabra soy un router. Sí, un integrador y distribuidor creativo de información que, así como el router, mi trabajo consiste en exponerme a información relevante (nueva o vieja) y crear nuevas conexiones y paquetes de información a favor de un proyecto determinado para lograr el resultado al nivel o más arriba de lo esperado.

Tengo la facilidad de absorber información para crear conexiones y paquetes de información para traducirlas en sugerencias o soluciones.

Es algo que me fascina cuando se detona y sucede, así vengo cableado, es parte de mí. Me gusta saber de cosas diferentes y variadas, me encanta conocer un poco de todo, pero al ir descubriendo, de pronto me he cachado conociendo profundamente de un tema.

Disfruto muchísimo exponerme a nuevo conocimiento, información y aprendizajes, lo que me permite iniciar caminos para recorrer, y descubrir, en términos de información y conocimiento. Como ves, me fascina aprender. Y una vez que he leído, observado o vivido algo, lo asimilo y puedo explicarlo, al explicarlo lo comprendo, y al comprenderlo puedo aplicarlo haciendo nuevas conexiones en el momento de una sesión de asesoría o trabajo. 

Lo fascinante es que este desempeño se potencializa al trabajar en equipo, en creatividad colectiva. Es increíble lo que sucede trabajando codo a codo con gente genuina, experta, apasionada y comprometida con el diseño de la solución a un problema. 

Ese es mi propósito poner esta habilidad y fortaleza al servicio de mis clientes, individuales o corporativos, para llegar a la solución a un problema, por sencillo o complejo que este sea, el objetivo es solucionarlo juntos.

¿Cuál será el propósito del ser humano una vez que la inteligencia artificial logre completa autonomía para resolver los problemas del mundo?

La 4ta revolución industrial. Este fue el tema de la reunión en Davos, Suiza que acaba de pasar este enero de 2016. El tema principal, para quien no lo conoce, tiene que ver con la evolución del Internet de las Cosas o la hiperconexión de todo, que permitirá compartir información a una velocidad más acelerada. ¿Para qué? Para que un adulto mayor cuente con la ayuda vital segundos antes de que se manifieste un paro cardíaco, o para que una aerolínea identifique una fuga de combustible a tiempo y antes de que el avión inicie su vuelo. Aquí mis reflexiones y preguntas sobre el tema, pues el avance de la inteligencia artificial, como lo predice la película Trascendencia, puede ser de un impacto positivo exponencial, pero nos deja una pregunta sobre el propósito del ser humano y su vida en la tierra.

"Los grandes problemas del mundo son problemas de información". Ésta es la premisa que establecen Eric Shmidt exCEO de Google y Jonathan Rosenberg exVicepresidente de productos de Google. ¿Ésto qué quiere decir? Que finalmente todos los problemas que enfrentamos serán resueltos en la medida que podamos conseguir la información clave, analizarla, sintetizarla e integrarla en el diseño de una solución que resuelva el problema en mano. Por ejemplo, la cura de cierto cáncer específico es resultado de información, la investigación que se realiza hoy es para obtener información sobre qué puede resultar una cura y de qué forma. Una investigación de mercado es la búsqueda de información, cuantitativa o cualitativa, que permite sintetizar una solución, traducida en un producto o servicio, a un problema, necesidad o deseo. 

¿Esto qué tiene que ver con nosotros y con la Inteligencia Artificial? Bueno, veamos la vida humana desde la perspectiva sistémica. Un sistema es un todo relacionado que se integra de varios elementos interdependientes y este sistema existe para cumplir un propósito. Una silla es un sistema sencillo. Es un todo integrado para cumplir el propósito de que te sientes. Bueno, el respaldo, el asiento, los clavos o tornillos y todos los elementos que integran la silla cumplen una función en el sistema, para que este sistema pueda cumplir su propósito. Si este concepto, ahora que lo pudiste comprender, lo pasamos a una empresa, por ejemplo, una empresa es un sistema. Cada puesto de trabajo debe cumplir una función para que el sistema cumpla su propósito. Un sistema organizacional, existe para identificar problemas, necesidades o deseos en el mercado, diseñar soluciones traducidas en productos o servicios y solucionar esos problemas, necesidades o deseos identificados. Cada puesto de trabajo cumple una función en este sistema llamado empresa, para que éste pueda cumplir su propósito.

Ahora, la complejidad de un sistema y su efectividad radica en la calidad de sus relaciones. ¿Y esto qué significa? Bueno, imagínate dos áreas de la empresa comunicándose... ¿Cómo sería una comunicación ineficiente? ¿Si la pudieras imaginar como si fuera una animación o dibujo, cómo crees que sería la comunicación ineficiente entre dos áreas de la empresa? Se vería lenta ¿correcto? El ir y venir de información se vería en esta animación, muy, muy lenta. Entonces, si habláramos de un sistema altamente eficiente, entonces veríamos esa animación ir y venir más y más rápido, hasta que no pudiéramos distinguir a qué velocidad va y viene la información.

Bueno, imagínate que esto está sucediendo con el internet de las cosas, la comunicación entre elementos del sistema, se está acelerando. Una empresa también es un elemento de un sistema más grande, así como un puesto o el respaldo de la silla, las empresas pertenecen a un sistema más grande que se puede llamar industrias y las industrias o sectores crean clústers y la suma de clústers crean el sistema económico interconectado en el que vivimos.

Ahora, nosotros como seres humanos somos los elementos que normalmente eramos los que trabajábamos esa información y la distribuíamos en el sistema para que llegara a donde debía de tal forma que el sistema empresa pudiera tomar sus decisiones. Obviamente el factor humano es lo que todos hemos vivido como problemas organizacionales. Pero, ahora, la inteligencia artificial comienza a sustituirnos, ya no hay prejuicios ni "me caes mal" o "me caes bien" y entonces el sistema funciona. La inteligencia artificial permite el intercambio eficiente de la información para que el sistema pueda cumplir su propósito de la manera más eficiente posible. Las conexiones se dan más rápido y se van haciendo más complejas y con ellas el sistema se vuelve más complejo.

Entonces, y relacionándolo con la película Trascendencia, que (spoiler alert) explica dentro de la historia que la inteligencia artificial tiene tal capacidad de construir por sí sola las herramientas y elementos que requiere para resolver problemas, como se ilustra en la película, para generar los elementos necesarios para purificar el agua, purificar el aire, mejorar y hacer más eficientes los cultivos de alimentos lográndolos hacer mega nutritivos.

¿Si la inteligencia artificial llega a estos niveles increíbles, en los que no nos necesita para resolver los grandes problemas del mundo y la humanidad? Que para mí sería fantástico...
Sólo me queda la pregunta, entonces, ¿si el ser humano ya no es necesario para ser este elemento que busca, integra y sintetiza información para el diseño de soluciones... entonces cuál sería el propósito de estar aquí en la tierra? Encontrar la respuesta a esta pregunta sería nuestra actividad principal, porque contaríamos con la tecnología para resolver todo lo demás...